Sala: Teatro Galileo Autor: Juan Mayorga Director: Víctor Velasco Intérpretes: Miguel Lago Casal, Óscar Nieto San José, Olaia Pazos, Rodrigo Sáenz de Heredia, Sergi Marzá, Natalia Braceli Duración: 1.50'
Información práctica (el enlace inactivo puede significar que la función ya no está en cartel)
Ésta fue mi crítica en la Guía del Ocio:
No he tenido especial sintonía, hasta ahora,
con la obra de Mayorga, autor universalmente aclamado. Digo hasta ahora, porque
El chico de la última fila me ha
parecido un texto de enorme altura. No sorprende que haya llegado al cine en
Francia: recuerda mucho, por ejemplo, a los guiones de Chabrol que
diseccionaban supuestos bienestares familiares. Mirando más atrás, reproduce el
esquema de Teorema de Pasolini: un
personaje se incrusta en un equilibrio preexistente y lo revienta, haciendo
patente su inestabilidad. Quizá la mayor virtud de la pieza esté en el perfecto
delineado que Mayorga realiza de todos y cada uno de los personajes; incluso,
valga la paradoja, del difuso nimbo de indefinición que rodea al muchacho
protagonista.
Velasco la ha dirigido con sencillez, sin
estorbar, dejando hablar al texto. Con una combinación de escenografía e
iluminación que hace temer lo peor a primera vista, pero que revela su
potencial a medida que la historia se desarrolla. Muy bien Óscar Nieto en un
registro neutro que no es fácil mantener con tanta convicción durante casi dos
horas. Eficaz Miguel Lago, que lleva el peso narrativo. Me gustó mucho Sáenz de
Heredia; también los demás, pero Braceli se resiente un poco de que la hayan
colocado en un registro completamente distinto al del resto.
Que conste que estoy MUY CONTENTO de que un texto de Mayorga me haya gustado tanto. Como sacarme una espinita, a ver si iba a ser yo el raro.
P.J.L. Domínguez
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